Article contents
Sleeping with the “Enemy”
Metal Detecting Hobbyists and Archaeologists
Published online by Cambridge University Press: 16 January 2017
Abstract
In 2012, the Archaeology Department at James Madison’s Montpelier began an experimental program with Minelab Americas to encourage metal detectorists to become more involved in the scientific process of archaeological research. Specifically, the program is designed to be a week-long experience in which archaeologists and metal detectorists work together to identify and preserve archaeological sites at the 2,700-acre Montpelier property. In the process, the metal detector participants are taught the importance of site preservation through background lectures and hands-on field training in which they use their metal detectors as a remote sensing device. Participants learn how gridded metal detector surveys are conducted and the importance of proper context and curation of recovered objects. The team-based approach of our program has resulted in a co-creation process whereby metal detectorists bring to the table their skills in using their machines to identify subtle metallic artifact signals and archaeologists bring the skill of systematic survey techniques to map and record archaeological sites. In the end, teamwork encourages open and frank discussions regarding the interface between metal detecting and the archaeological communities and has gone a long way toward reconciling differences between these two groups who have a long history of strained relations.
En 2012, el departamento de arqueología de James Madison Montpelier dio inicio a un programa experimental con Minelab Americas para alentar a los usuarios de detectores de metales a que se involucren de manera más cercana con el proceso científico de la investigación arqueológica. Específicamente, el programa que se ha diseñado se lleva acabo en una semana, durante la cual, los arqueólogos y los usuarios de detectores de metales trabajan juntos para identificar y preservar los sitios arqueológicos que se ubican en los 2,700 acres que comprende la propiedad de Montpelier. Como parte de este proceso, a los usuarios de detectores de metales se les enseña la importancia de la preservación de sitios a partir de conferencias en donde se les plantean los antecedentes y se les proporciona capacitación para usar sus detectores de metales como instrumentos de prospección remota. Los participantes aprenden como desarrollar recorridos reticulados con el detector de metales, así como la importancia del contexto y de la curaduría de los objetos. El enfoque del trabajo en equipo ha resultado ser un proceso de creación en colaboración mediante el cual, los usuarios de detectores de metales ponen sobre la mesa sus habilidades en el uso de estos instrumentos para identificar las señales metálicas sutiles que emiten los artefactos y los arqueólogos aportan el potencial de las técnicas del recorrido de superficie sistemático para mapear y registrar sitios arqueológicos. Finalmente, el trabajo en equipo fomenta discusiones abiertas y directas en torno a la interfase entre los usuarios de detectores de metales y las comunidades de arqueólogos, lo que representa un gran avance hacia la reconciliación de las diferencias existentes entre estos dos grupos que han mantenido relaciones tensas por mucho tiempo.
- Type
- Research Article
- Information
- Advances in Archaeological Practice , Volume 3 , Issue 3: Special Issue: Co-Creation , August 2015 , pp. 263 - 274
- Copyright
- Copyright © Society for American Archaeology 2015
References
- 12
- Cited by