Hace diez años, el 8 dejunio de 1977, la Conferencia Diplomática sobre la reafirmación y el desarrollo del derecho internacional humanitario aplicable en los conflictos armados aprobó dos Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra de 1949 relativos uno a la protección de las víctimas de los conflictos armados internacionales y el otro a la proteccion de las victimas de los conflictos armados no internacionales.

Nuestro planeta tiene actualmente cinco mil millones de habitantes. En 1863, año de la fundación de la Cruz Roja, y en el que se realizaron los primeros esfuerzos de codificaión del derecho en los conflictos armados, tenía mil millones. Durante casi un siglo, la Cruz Roja ha fijado, sucesivamente, su atención en los militares heridos en combate, en las víctimas de los enfrentamientos navales, en los prisioneros de guerra y en las personas civiles abandonadas —en tiempo de guerra— a la arbitrariedad de una soberanía extranjera.

No basta con redactar un nuevo tratado international; hace falta, además, que los Estados quieran respetarlo. Este asenso del Estado de respetar las nuevas obligaciones se manifiesta, en primer lugar, mediante la ratificación del tratado o su adhesión al mismo.

Con motivo del X aniversario de la aprobación, el 8 de junio de 1977, de los Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra de 1949 por la Conferencia Diplomática sobre la Reafirmación y el Desarrollo del Derecho International Humanitario Aplicable en los Conflictos Armados, la Revista ha querido que las Socìedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja participen en la redactión de este número especial para que sea el reflejo, lo más diversificado posible, de las opiniones de las Sociedades Nacionales de las distintas partes del mundo sobre los Protocolos y de las gestiones que éstas han emprendido para promover su ratification y su difusión.

Desde que terminó la Segunda Guerra Mundial, la Cruz Roja Alemana en la República Federal de Alemania (CRA) atribuye gran importancia al desarrollo del derecho internacional humanitario. Los resultados de la Conferencia Diplomática de 1949, que elaboró los cuatro Convenios de Ginebra, suscitaron, naturalmente, un interés especial por la situación que reinaba en la Alemania ocupada de la posguerra y por los millones de prisioneros de guerra y de desaparecidos que aún había entonces. Después de que, en 1950 y 1959, se fundaran de nuevo la Cruz Roja Alemana en la República Federal de Alemania y la Cruz Roja Alemana en la República Democrática Alemana, respectivamente, siguió ese interés.

En noviembre de 1977, el Gobierno belga confió a una comisión interdepartamental el estudio de las cuestiones relativas a la ratificación de los Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra, aprobados el 8 de junio de ese mismo año, antes de que fuesen abiertos para la firma el 12 de diciembre. Se trataba, en esa etapa, de determinar si Bélgica debía formular alguna declaración interpretativa, incluso reserva, en el momento de la ratificación y de preparar el proyecto de ley para aprobarla. Esto suponía una concertación, no solamente entre los diferentes departamentos ministeriales concernidos por la aplicación de los Protocolos, sino también entre el Gobierno belga y los Gobiernos de los países miembros de la alianza militar de la que Bélgica formaba parte.

Desde el 20 de noviembre de 1986, Bélgica está obligada por las disposiciones no sólo de los Convenios de Ginebra de 1949, sino también por las de los Protocolos adicionales de 1977. Por consiguiente, todos los ciudadanos belgas deben tomar las medidas necesarias para dar cumplimiento a las obligaciones que les corresponden.

Al ratificar los Protocolos, Bélgica se comprometió a respetar y hacer respetar las citadas normas en toda circunstancia.

Hace diez años se aprobaron, en Ginebra, dos Protocolos adicionales a los cuatro Convenios de Ginebra: uno relativo a la protección de las víctimas de los conflictos armados internacionales, el otro a la protección de las víctimas de los conflictos armados no internacionales. Esto supone un avance en el desarrollo del derecho intemacional humanitario aplicable en los conflictos armados. El mayor problema con que se enfrentaban los abogados de derecho intemacional humanitario en los años de la postguerra era la protección de las personas civiles en caso de conflicto armado, particularmente en un período caracterizado por las guerras de liberación nacional.

El derecho international humanitario es, por así decirlo, un conjunto de medidas destinadas a hacer respetar la moral que, a su vez, establece un puente entre el derecho y la política. Abarca los deberes mínimos de las Partes en conflicto en caso de conflicto armado international o national.

Veinte años después de que se aprobaran los cuatro Convenios de Ginebra en 1949, las organizaciones internacionales humanitarias concernidas, en particular el CICR, creyeron conveniente ampliar esos tratados humanitarios. Tras varias sesiones preliminares con expertos de diferentes Gobiernos y Sociedades Nacionales, el CICR llegó a la conclusión de que no convenía revisar los Convenios de 1949, sino redactar dos Protocolos adicionales: el primero de ellos referente a los «conflictos armados internacionales» y el segundo a los «conflictos armados no internacionales», con el fin de completar y desarrollar los Convenios de Ginebra.

Con motivo de la próxima celebración de los primeros 10 años de los Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949, la Redacción de la Revista International de la Cruz Roja ha invitado, muy gentilmente, a la Cruz Roja Mexicana para que escriba un artículo sobre este acontecimiento resaltando la importancia de esos instrumentos jurídicos para ella, las gestiones que se han hecho acerca de su difusión pero, tal vez mas importante, la labor que esta Sociedad Nacional ha realizado en favor de su ratificatión.

Los Países Bajos contribuyeron en gran medida a la redacción del texto de los Protocolos de 1977 y fue uno de los primeros Estados en firmar esos instrumentos, el 12 de diciembre de 1977, en Berna. Sin embargo, hasta hoy, aún no los ha ratificado. Por qué ese retraso?

Hay numerosas razones para ello. Por una parte, los Países Bajos son miembros de la Organizatión del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), la cual necesitó mucho tiempo para evaluar los Protocolos a la luz de sus planes de defensa militar. Por otra, según las normas y la práctica constitucionales, siempre que el Gobierno holandés desea ratificar un tratado, debe obtener primero la autorización de ambas Cámaras del Parlamento.

Noruega partitipó activamente en los debates que concluyeron con la aprobación de los Protocolos adicionales de 1977. Muchos representantes noruegos asistieron a la Conferencia Diplomática sobre la Reafirmación y el Desarrollo del Derecho Internacional Aplicable en los Conflictos Armados (Ginebra, 1974–1977), así como a las reuniones de expertos que la precedieron.

Tres Ministerios —el de Defensa, el de Justicia y el de Relaciones Exteriores— examinaron a fondo los resultados de la Conferencia Diplomática antes de presentarlos a la Asamblea Nacional (Storting).