La adhesión a los tratados de derecho intemacional humanitario, en particular a los Convenios de Ginebra de 1949 y a sus Protocolos adicionales de 1977, es sólo para los Estados una primera etapa en el respeto de ese derecho. Esa etapa debe ir seguida de esfuerzos para aplicar esas normas a nivel nacional. Dichos esfuerzos engloban muy diversos elementos, que van desde la promulgación de leyes y reglamentos nacionales a la localización o el señalamiento de los edificios y otras obras protegidos por ese derecho.